Aliens: Colonial Marines - Noticias

17 semanas después de los acontecimientos de Aliens, un batallón completo de Marines Coloniales viaja a LV-426 a bordo del USS Sephora en respuesta a una llamada de auxilio enviada por el cabo Dwayne Hicks. A su llegada, el Sephora atraca con el USS Sulaco, que ahora está en órbita alrededor de LV-426 a pesar de haber sido visto por última vez sobre Fiorina "Fury" 161, y envía a los marines a bordo para investigar. Se descubre una infestación masiva de Xenomorfos en el interior de la nave y varios marines mueren en el ataque inicial. Mientras investigan la nave, el cabo Winter, el soldado O'Neal y la soldado Bella Clarison descubren que los PMC de Weyland-Yutani están ahora al mando de la Sulaco y han estado criando xenomorfos a bordo para su estudio.

Los mercenarios corporativos hostiles atacan al Sephora utilizando el armamento del Sulaco y ambas naves son destruidas después de que el Sephora tome represalias. Winter, O'Neal, Bella, su comandante, el capitán Cruz, el androide del Sephora, Bishop, y el piloto, el teniente Reid, escapan a bordo de la nave de Reid y se refugian en las ruinas del complejo de la colonia Hadley's Hope en LV-426, que ahora yace casi completamente destruida tras la detonación de su Planta de Procesamiento de Atmósfera. Cruz ordena a todos los supervivientes de los Marines Coloniales que se reúnan en la colonia, con la esperanza de resistir hasta que llegue un rescate. Mientras investiga las ruinas de la colonia, Winter descubre unos Xenomorfos que sólo reaccionan al sonido y al movimiento y que atacan explotando de forma suicida, así como el cadáver del soldado Hudson de los Marines de Sulaco.

Con su posición tan segura como pueden esperar, Cruz ordena a Winter que viaje a un centro de investigación Weyland-Yutani cercano a la nave abandonada y recupere un manifiesto que identifica a un prisionero desconocido que la compañía ha capturado, aparentemente un superviviente del Sulaco. Resulta que Bella está impregnada de un Chestburster, y en un intento de salvarla, Winter y O'Neal aceptan la misión y escoltan a Bella hasta las instalaciones, donde pretenden "convencer" al personal superviviente para que le extraiga el embrión. Sin embargo, al llegar, un interrogado oficial médico de Weyland-Yutani les explica que no se puede salvar la vida de Bella ya que, aunque se logre extraer el embrión, la placenta invasiva de la criatura es cancerosa y la matará de todos modos. Bella muere cuando el Chestburster eclosiona mientras se despide de Winter y O'Neal.

Winter y O'Neal recuperan el manifiesto al que fueron enviados para encontrar y rescatar al prisionero, que se revela como el cabo Hicks, quien explica que Weyland-Yutani interceptó y abordó el Sulaco antes de su llegada a Fiorina 161. Un incendio en la bahía de hipersueño hizo que Ripley, Newt y Lance Bishop fueran expulsados de la nave en un EEV, junto con el cuerpo de un hombre no identificado que fue confundido con el cabo. El propio Hicks fue capturado por el personal de Weyland-Yutani y sometido a tortura durante el interrogatorio, supervisado por Michael Weyland en un intento de aprender más sobre los orígenes de los Xenomorfos y de obtener el control de los sistemas de armamento de la Sulaco.

A través de Hicks, los marines de LV-426 se enteran de que una nave con capacidad FTL está atracada en el centro de investigación, lo que representa la última oportunidad para los supervivientes de escapar de la luna. Después de reunir al personal restante de Sephora y luchar contra un ataque xenomorfo a la colonia, el capitán Cruz ordena un asalto total al complejo Weyland-Yutani con la esperanza de capturar la nave FTL. Winter y Hicks encabezan el avance, pero la nave sale minutos antes de que puedan alcanzarla. En un último intento desesperado, Cruz pilota una nave de descenso hasta la nave que escapa y se estrella en su hangar. Winter se enfrenta a la Reina Xenomorfa en la bahía del hangar, e intenta expulsarla utilizando un sistema de lanzamiento de carga, pero falla cuando vuelve a subir a bordo. Cruz se sacrifica cuando lanza la nave de transporte averiada directamente contra la Reina, impulsando a ambos hacia la atmósfera superior de LV-426.

Winter, O'Neal, Reid, Bishop y Hicks encuentran y se enfrentan a Michael Weyland, pero Hicks deduce que no es más que un doble androide dejado atrás como señuelo y lo ejecuta sumariamente. En busca de información útil, Bishop se conecta a la CPU del androide destruido y afirma que lo tiene "todo", preparando el terreno para un nuevo enfrentamiento entre los Marines Coloniales y la Corporación Weyland-Yutani.